miércoles, 14 de abril de 2010

Homenaje Trapero


Cierto oficial del ejército español declaró allá por los años 70 en plenas huelgas obreras del Baix Llobregat -vísperas de la Transición a la democracia- y una incipiente escalada del terrorismo de ETA,que España tenía dos graves problemas: ETA y Cornellá.

Mito o no, la frase transmitía el espíritu salvaje de la periferia, de la lucha de una clase trabajadora inmersa ya en lo que sería una cercana crisis en todos los niveles: social, laboral, económica y política.

En medio de aquel caos y con 1977 a la vuelta de la esquina, surgió La Banda Trapera del Río, una banda de punk?, rock?...qué más da el estilo, en el barrio de Sant Ildefons de Cornellá de Llobregat, más conocido como Ciudad Satélite, uno de los símbolos del cinturón rojo barcelonés y donde prácticamente se hacinaban miles de inmigrantes procedentes de la España rural en bloques colmena construidos en tiempo record, sin orden ni control.

Sin servicios básicos, víctimas del desarrollismo franquista, ignorados por la Barcelona y la Catalunya progre de la Nova Cançó, por la burguesía que apoyó a Franco y por los nuevos hippies que bebieron de las fuentes del 68, sin posibilidad de integración en la cultura catalana, aquel contexto era el caldo de cultivo perfecto para la generación de iniciativas subversivas, de protesta o simplemente de un nihilismo que el periodista Jaime Gonzalo en la biografía del grupo Escupidos de la boca de Dios resume y contextualiza de forma excelente. Un grupo y su entorno que es expresión de lo maldito, sin concesiones, sin padrinos culturales (¿para qué?) y ante cuya biografía no resisten comparaciones ni movidas madrileñas, ni ramoncines, ni autodestrucciones esponsorizadas por la industria musical y al que sólo los Ramones se les podría acercar.

En 2004 fallecía Tío Modes, guitarra del grupo al que dediqué un artículo en la prensa comarcal barcelonesa y en el portal Rebelion.org; pocas semanas después nos dejaba también el que fue guitarrista Emilio "Rockhita" y este martes 13 de abril de 2010 nos ha abandonado Juan “Raf” Pulido, batería, letrista y sobre todo pilar y motor de La Banda Trapera del Río.

Durante 2009, el grupo decidió juntarse para un concierto homenaje en la ciudad dónde nació la Trapera -Cornellá de Llobregat- y posibilitando una mini gira por diferentes ciudades españolas y que sirvió de hilo conductor para la realización de un documental que posiblemente verá la luz pública durante 2010. En este período una enfermedad comenzó a cercenar la salud de Juan hasta dejarle sin posibilidad alguna para seguir demostrándonos su arte y humanidad. El que fue el último concierto de La Banda Trapera del Rio y ya sin Juan Pulido en el escenario, en marzo pasado en el escenario de Rambleros en Barcelona sirvió de homenaje a la figura de un artista que al igual que Tío Modes, vivió para la música, su gente, de forma inconformista y contra los convencionalismos de una sociedad que nos dice cómo tenemos que vivir, engullendo héroes anónimos sin piedad.

Descansa en paz, Juan.